Hacia el objetivo. Es duro, pero el final lo recompensa!

Hola kaminantes!

Desde hace unos meses que este blog está empolvandose. Mea culpa! Tanto K en mi cabeza no me deja respirar! jeje. Hoy voy a hablar en relación al último post, ya que creo que es muy necesario hacerlo actualmente para mi (personalmente), pero también para mucha gente que se encuentra en la misma situación.

En muchas ocasiones, cuando se marcan objetivos, tenemos que prescindir de muchas cosas. Muchas cosas a las que amamos, queremos y creemos que no podemos vivir sin ello. En estas ocasiones, es cuando se ha de reflexionar, levantar la cabeza y luchar por lo que se quiere. 

La zona de comodidad es muy buena. Todo es genial y lo dominamos todo, pero a lo mejor esa zona de comodidad no nos deja llegar a donde realmente queremos, donde anhelamos estar o simplemente, lo que necesitas.

En estas ocasiones, solo hace falta esperar a un momento justo, poner un punto y a parte, hacer la maleta y emprender la ruta. Esa ruta hacia el desierto, donde cada uno se encuentra un montón de adversidades (como dice el gran Germán Antelo el saboteador) y que se han de superar. Los saboteadores muchas veces no dejan de ser pensamientos, actitudes o visiones de lo que vemos durante el camino. Este camino está lleno de trampas que se pone cada uno y que no dejan de nublar la visión.

Por eso, yo animo a tod@s a seguir el sabio y simple consejo:

Hay gente que tiene muchos problemas diferentes: no puede pagar la comida, el alquiler o simplemente que no sabe que hacer con su vida. A esta gente les digo: no mires lo que tienes ahora o como conseguirás las cosas. Haz lo que haga falta, con cabeza sobretodo, para conseguir lo que te propones! Es durísimo en muchas ocasiones, aunque se sabe y la teoría se sabe, pasarlo en uno mismo es muy diferente. Te derrumbas, de dejas caer y crees que levantarte te costará. En estos momentos, tienes que buscar soluciones, encontrar a alguien que te ayude, encontrar algo que te motive, que te llene la cabeza de cosas positivas y que los problemas que te provocaban los saboteadores, queden mermados a la nada.

Por eso os invito a tod@s a que en esos momentos tristes, desanimados o que simplemente necesitéis a alguien o algo para revivir el espíritu positivo, llamar a amigos, escuchad música alegre o simplemente haced lo que más deseéis en ese momento sin perturbar lo que te preocupa y siempre hacia el objetivo marcado.

Saludos kaminantes y sobretodo: Don't give up!

Ferran